La diversidad de opiniones es una estrategia que conforta la personalidad.



lunes, 25 de enero de 2010

Allá donde fuimos.


Esta mañana me he sorprendido tarareando "Land of 1000 dances" de Wilson Pickett; yo la conocía más por la versión del viejo rockero Ted Nugent. Hace unos días me regalaron un disco de recopilaciones en el cual aparecía la versión original de Pickett. Seguro que al oírla se quedo dando vueltas en mi cabeza buscando el momento de salir.
Luego, según ha transcurrido el resto del día la he vuelto a canturrear por los menos dos veces más. En una de ellas me han venido recuerdos de tiempos ligados a otra etapa de mi vida, y sobre todo, recuerdos de aquellos amigos: del chara, del mosca, del ojitos, del juanra, del zanahorio, del francés; y me ha invadido un poco la nostalgia, al recordarnos niños otra vez.
A muchos de ellos no les he vuelto a ver desde hace más de veinte años, y a otro, no creo que le pueda ver nunca más, pero esta mañana al menos por unos minutos nos he visto con quince años escuchando tan felices y despreocupados, "Land of 1000 dances", en cualquier tarde de verano junto al frontón.
Según vamos creciendo, vamos anexionando canciones a la banda sonora de nuestra vida, donde permanecerán, algunas ocultas, otras no tanto, y otras resurgirán al volverlas a escuchar; pero todas ellas nos pueden llevan siempre que queramos a un bonito sitio: a la memoria de nuestra existencia.
Qué una sola canción tenga el poder tan convincente de hacerte recordar personas, lugares, cosas, sentimientos; es algo tan mágico. Tal vez muchas hallan envejecido mal, como muchos de nosotros, pero su poder evocador seguirá siempre que las escuchemos en nuestra cabeza, y si hacemos el ejercicio de recordar escuchándolas, o simplemente las dejamos hablar por si solas, seguro, casi seguro, que nos llevaran allí; donde una vez hace tiempo estuvimos o fuimos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Esto es lo que yo llamo la Banda sonora de nuestras vidas, y que importante es!!! Junto con los olores, cuantas historias nos evocan... π

Hathaway dijo...

Bien cierto...